El País Vasco: Guernica y Bilbao

Si estás en el País Vasco y además de pinchos, playas y chacolí te interesan sus raíces, cultura, e historia, debes pasarte por Guernica. Como a mí todo eso me interesa y mucho, a veces demasiado, cogimos el coche desde San Sebastián para pasarnos por allí.

El baricentro de Guernica es sin duda la Casa de Juntas, donde está el símbolo de la antigua soberanía foral de los territorios vascos por excelencia, el legendario roble bajo el cual los Señores de Vizcaya juraban lealtad a las viejas leyes vizcaínas y donde se celebraban las reuniones de las antiguas Juntas. 

En la casa de Juntas visitamos el edificio de Santa María la Antigua que todavía hoy desempeña las funciones de iglesia y parlamento, algo muy significativo. Su principal espacio es el salón de plenos, de área elíptica, en sus lados se encuentran los asientos para los junteros y en la cabecera se ubica un altar – no podría ser de otra forma –  que se reconvierte en mesa presidencial. En sus muros hay ventiseis cuadros de los diferentes señores de Vizcaya.

Fuera del salón de plenos visitamos la sala de la vidriera que hace las funciones de museo de la historia de Vizcaya. Sin duda, lo que más impacta es su techo – vidriera que representa los edificios más significativos y las diferentes fuentes productivas (pesca, agricultura, minería, industria, etc.) que son la mejor expresión de los fueros de Vizcaya que la figura del Árbol de Guernica engloba. 

Fuera de la Casa de Juntas con su famoso Árbol, la verdad, es que poco más hay en Guernica. Así que cogimos el coche y nos fuimos para la capital, financiera ahora e industrial no hace mucho del País Vasco. Bilbao o Bilbo en vasco.

Como Guernica, la actual, moderna y turística Bilbao, tiene un punto neurálgico, donde se concentran sobre todo, visitantes y turistas. El Museo Guggenheim. Claro que Bilbao tiene muchos otros lugares que valen la pena visitar, principalmente en el casco viejo pero también en la parte nueva. Aún así el Guggenheim es el símbolo de la nueva Bilbao, la ciudad transformada, de ciudad industrial, gris y contaminada ha pasado en pocos años a ser ciudad, moderna, turística y limpia. 

Ejemplo de lo que el ser humano puede llegar a crear con la cultura, el arte y las nuevas tecnologías, Bilbao te enseña todo su potencial en la reconvertida ría y sus alrededores, pero sin olvidar su casco viejo, huella de sus orígenes y de su historia.

Se ti trovi nei Paesi Baschi e oltre ai pinchos, spiaggie e chacolí ti attirano le loro radici, cultura e storia, ti senti obbligato a visitare Guernica. Siccome a me tutto questo sempre attira molto e a volte troppo, prendemmo la macchina e da San Sebastián andammo a visitarla.

Il baricentro di Guernica è senza dubbio la Casa de Juntas, dove si trova il simbolo dell’antica sovranità dell’autonomia dei territori baschi per eccellenza, il leggendario rovere sotto il quale i Signori di Biscaglia giuravano lealtà alle antiche leggi di Biscaglia e dove si celebravano le riunione dell’antico consiglio.

Nella Casa de Juntas visitammo l’edificio di Santa Maria l’Antica che tutt’oggi svolge allo stesso tempo di chiesa e parlamento, qualcosa di significativo. Il suo spazio principale è il salone del parlamento, di area ellittica, dove sui lati si vedono i posti per i membri del parlamento e nella testa del salone si trova un altare – non potrebbe essere altrimenti – che si trasforma in tavolo presidenziale. Sulle sue pareti ci sono ventisei dipinti con i diversi signori di Biscaglia.

Oltre al salone del parlamento visitammo la sala della vetrata dove si trova il museo della storia di Biscaglia. Senza dubbio, il punto più impattante è il soffitto vetrato che rappresenta gli edifici più significativi e le diverse fonti produttive (pesca, agricoltura, attività mineraria, industria, ecc.) che sono la migliore espressione dei fueros (leggi di autonomia) che l’Albero di Guernica rappresenta.

Ponte di La Salve

Museo Guggenheim

Il famoso ragno dietro il Guggenheim

Il ponte di La Salve di fronte al fiume