Onomatopeyas vicentinas
Según el diccionario de la lengua española la palabra onomatopeya significa…
Así, maná-maná; maná-maná; maná-maná; es como suena una ambulancia en las calles de Vicenza. Aunque a un español en Vicenza le suena a manjar milagroso.
Así, ¡¡¡píííííííííííííííí!!!…no es un bebé que llora desesperadamente; es un vicentino al volante tras media milésima de espera en un semáforo.
Así, ring-ring; ring-ring; ring-ring suena el timbre de una bici con un vicentino siempre al mando.
Así el timbre de la puerta vicentina: ringgg…perdiéndose en el silencio, suena señorial y elegante como don Vincenzo.
Así suena Vicenza y aun más…
Pero la onomatopeya que más suena en Vicenza, se oye a la hora en punto. A la media hora. A tres cuartos. En cualquier momento. Y cuando menos te lo esperas. En cualquier calle, plaza y barrio. Siempre en alto y así suena: clanc…clanc…clanc. Y mucho más suena…